Una cosa es prepararse para la vida y otra prepararse para el siguiente día de vida ambas están íntimamente ligadas. Sin embargo aprender a pensar y resolver problemas es una herramienta muy valiosa para llegar a ser personas resolutivas, críticas y creativas.
El desarrollo intelectual es la capacidad para resolver problemas y, a pesar de que esta habilidad se liga en forma sistemática a la matemática y a la inteligencia abstracta, la realidad es que la mayor parte de los retos a los que se enfrenta un ser humano están ligados a la vida diaria.
Según Pérez, Bados y Beltrán, “la gran diferencia entre una persona potencialmente inteligente y otra que realmente lo es se encuentra en el empleo de sus destrezas de pensamiento”.
Colaboradores que propongan ideas, actitud proactiva hacia la generación de ideas, ayudando así a elevar la productividad.
Cualquier persona que desee desarrollar su potencial de pensamiento.
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